A la Ilha por Saudade...

¡Y no me aguanté!
Así de simple.
Así de adolescente.
Me vuelvo a Morro.
Dejo atrás el cansancio de la crisis subprime,
la pena-silente-y-pa'-dentro de la última pateadura en el suelo de Guridi,
la eterna rinitis que me produce el aire acondicionado
y la neurosis del "parece-que-nos-van-a-echar" de la oficina.
Me cansé.
De la paranoia en Mac-Iver
De la neurosis de Nueva York.
Del egoísmo bipolar del Jose.
Me voy a mi-isla-por-un-rato.
A tomar solcito, agua de coco, cerveija y caipirihna.
Me llevo mi cámara, mi equipo de snorkel, 3 bikinis, un bloqueador, una cajita de protégeme-si-soy-mala, un pintalabios rojo, un pareo, mi música, dos libros...
¡y a mi hermana!
Así que esta vez nada de sosinha.
Meua hermana y eu
¡nos vamos de vacacioncinhas!
¡yeeeeeeei!